A una amiga anorexica (Chasis)

Estás igual que un silbido
más delgada que un fideo
cuando pasas por el sol
no haces sombra ni queriendo
lo que era un cuerpo glorioso
es solo un saco de huesos
las rosas de tus mejillas
son dos cardos borriqueros
carnoso melocotón
era tu hermoso trasero
tu sola lo has convertido
en un vulgar higo seco
y no digamos ya nada
de tus espléndidos senos
eran pura maravilla
y ahora da pena verlos
en fin mi querida amiga
te lo diré sin rodeos
tienes chasis de Ferrari
y pareces un Seiscientos
¡por qué maltratas chiquilla
de esa forma tu cuerpo!
¡ignoras que de tu alma
él es el puro reflejo!
deja pues ya de mirarte
en ese maldito espejo
que no para de decirte
que tienes grasa en exceso
acéptate como eres
tus amigos te queremos
con todos tus pros y contras
tus virtudes y defectos
yo desde aquí te demando
que te cuides de ese cuerpo
y verás como tu alma
logra la paz y el sosiego
y piensa que en esta vida
nada ni nadie es perfecto
ni tan siquiera tu misma
te quiero mucho, un beso.